Su cuerpo caminaba de forma lenta, su mente ultimamente se encontraba mas distraida de lo normal cosa que hacia que sus caminatas por todo el vortice se hicieran tal ves mas cortas de lo que se podria imaginar.
Sus orbes rojizas divagaban perdidas aquel bosque, mientras las criaturas se retiraban a su paso y las plantas se movian de forma magica, casi con miedo a tocarle. Aquello siempre le habia hecho reir, el que le tuvieran miedo era algo realmente tonto.
Sus oidos se afinaron, era realmente normal que por las tardes y todas las noches se escucharan sonidos muy parecidos a los de diversos instrumentos musicales pero era obvio que aquello era la suave melodia de una flauta..
¿Flauta? Se cuestiono.
Su cuerpo pronto se detuvo y observo a los alrededores... "Una nueva criatura". Dedujo rapidamente, sus alas se extendieron y estas parecieron tomar con rapidez todos los tenues rayos que el sol aun proporcionaba, un par de aleteos fuertes removieron las hojas secas que habian en el suelo y estos alzaron su "fragil figura" ... Se dispuso a recorrer el bosque desde las alturas, tal ves agudizando su oido para poder divisar el causante de tal armoniosa melodia...
Tardo segundos en divisarle y de la misma forma en que alzo vuelo, se destuvo, removiendo con el viento el cabello del joven. Dio un par de pasos para poder quedar frente a frente con este mientras sus alas parecian desaparecer de su espalda por arte de magia...
Quien sois joven ¿?